Nada mejor que la bicicleta para alejarse un poco y conocer los alrededores de Zahara.

Cerca de Atlanterra hay varios circuitos para los amantes de la bicicleta de montaña o para los que desean iniciarse en esta practica tan natural y saludable.

Estos circuitos tienen varios niveles de dificultad  dependiendo de la capacidad de cada persona.

Para los principiantes es recomendable empezar llaneando por los caminos de los molinos de viento o del “Cortijo del Moro”.

Este recorrido es completamente llano y la dificultad es baja. Se puede realizar en círculo pasando por la pedanía de “El Almarchal”. En una hora y  media podía estar terminado, pero ya lo veremos más adelante.

Hoy voy a contaros uno de los circuitos mas cercanos que podemos realizar.

La subida al “Faro de Camarinal” y al mirador del mismo nombre.

Dejando atrás las urbanizaciones seguiremos por  la carretera que nos lleva hasta la parte alta de Atlanterra.

Después de superar la subida comenzamos a bajar hacia la «Playa de los Alemanes», la dejaremos a nuestra derecha una vez tomado el desvío que nos conduce hasta el faro.

Llegar hasta el faro no tendrá mucha dificultad tan sólo una ligera pendiente hacía el final de la carretera.

La subida al mirador requiere algo de práctica y preparación física por lo complicado del camino, en concreto la subida al “Cortijo de las Cabras”, pero con constancia y paciencia se puede lograr.

El paisaje y las vistas lo merecen.

Desde mirador del faro podemos tener bonitas vistas de la “Playa del Cañuelo” y si el día está claro, podemos ver la costa africana, llegando a divisar la localidad de Tánger.

En nuestra ruta podemos encontrarnos gratas sorpresas, como los aficionados a los deportes aéreos  aterrizando sobre la arena de la Playa de los Alemanes.

Otro día subiremos un poco más alto, al «Mirador de la cueva del Moro» desde donde podemos ver la “Ensenada de Bolonia”, la “Ruinas de Claudio Vaelo”… esto será cuando estemos más preparados. Debemos ir poco a poco para que nos quede aliento para contemplar las maravillosas vistas.

Seguiremos  pedaleando…